El Jefe de Jefes llega a la Frontera

El ex presidente Manuel Zelaya Rosales ya lleva varios días en la frontera entre Honduras y Nicaragua. Al parecer, está constituyendo una fuerza armada revolucionaria, formada más que todo por viejitos, liderados por el longevo comandante 0 (Edén Pastora). Dicen que Edén no debería andar en esos trotes a estas alturas del partido, ya que puede sufrir de fractura de cadera secundaria a osteoporosis senil, o se le puede obstruir la sonda que usa para la hipertrofia de próstata. Otro grupo de viejitos que se pronunció a favor del ex presidente fueron los Cinchoneros, quienes dijeron estar preparados para el combate a cambio de anteojos bifocales para la presbicia. En fin, los combatientes del ex presidente deberían estar descansando en una confortable casa de ancianos.

La ex Canciller de la República Patricia Rodas, en entrevista para CNN el viernes pasado, dijo que su querido Mel entraría a Honduras arrastrando a gran cantidad de personas a su paso, al igual que lo hiciera Mohandas Gandhi en la India. Lo que no dijo Patty Rodas es si el ex mandatario usaría para tal fin un gigantesco pañal blanco, al igual que lo hacía el popular líder religioso. Pero todo este ajetreo en la frontera, ¿es idea de Mel? Definitivamente que no. A pesar de que no hay duda de la valentía del ex presidente, el plan es del presidente Chávez, quien ve cada vez más lejos la conquista de Honduras. La evidencia es que mandó, para acompañar a Mel, a su Ministro de Relaciones Exteriores Nicolás Maduro Moros (NiMaMo, para los amigos) a quien no le importa hacer un papelón con tal de no desobedecer las órdenes de su líder y camarada. Las instrucciones del presidente Chávez al ministro fueron explícitas y claras: “Cuidado y me dejas escapar al comandante vaquero. Me lo cuidas bien, y que no tire la toalla. Si huye, tu lo atajas aunque sea de los bigotes. Estás comisionado para eso. No te le separes ni a sol ni a sombra.” Y es así como el ministro a Mel le sirve de conductor, le agarra el micrófono mientras habla, y hasta le pone los calcetines, los zapatos y sus pantuflas de osito por las noches con tal de no perderlo de vista, por lo que dicen que a Patty Rodas le están entrando unos celos enormes.

El ex presidente, ante la orden de su comandante Chávez, logró atravesar la oxidada cadena que separa a Nicaragua de tierra de nadie, aunque no logró entrar a Honduras. La hazaña la celebró con Patty Rodas al son de “El Jefe de jefes”, y otros narcocorridos. Mientras, la familia del ex presidente se encuentra en un reten. Desde luego, si el ex presidente se quisiera reunir con doña Xiomara le diría que tomara un avión a Nicaragua para reunirse con él en aquel país. Pero claro, lo que menos quiere Mel en estos momentos es a dos viejas diciéndole que hacer (a Patty y a doña Xiomara). Si una sola ya lo tiene loco, imagínese con las dos. Cuando Mel entró a tierra de nadie y habló con Romeo Vázquez por teléfono, le dijo: “En nombre de la amistad que una vez nos unió, te pido que no me disparés pues vengo en paz, pero más que nada, no dejés pasar a mi vieja (la oficial). Por piedad, detenganla en el reten unos días.” Siento una profunda lástima por Mel debido a la situación por la que está pasando. Creo que existen pocas cosas en la vida peores que aguantar la presión de Patty Rodas y Hugo Chávez a la vez.

A Carlos Eduardo Reina, un activista político que lucha a favor de la instauración de la revolución y el baño de sangre en Honduras, se le encontró una libreta que contiene la lista de personas a las que se les ha hecho pagos en dólares. Cuando se le preguntó de donde provenía ese dinero, dijo que de empresarios, y que son dólares porque son más fáciles de manejar que los lempiras. Presumiblemente, los empresarios son los comandantes de las Fuerzas Revolucionarias de Colombia (FARC), quienes, al igual que los hermanitos Castro, apoyan la restitución de la democracia en Honduras. Bonito y simpático grupo de demócratas de las Américas, lo que demuestra lo sencillo que resulta moldear y retorcer los conceptos para engañar al público.

Mientras tanto, los presidentes sudamericanos que otrora acompañaran a Manuel Zelaya en sus giras artísticas, están ocupados con sus propios asuntos. El presidente Correa tendrá que desvirtuar las acusaciones de Colombia relacionándolo con las FARC, y Chávez está entretenido con la nueva base militar que Estados Unidos está poniendo en Colombia. El presidente Chávez dice que los Yankees imperialistas están amenazando Venezuela. ¿Y qué dice Chávez sobre las maniobras militares conjuntas de Venezuela con los rusos? Pues nada, que vinieron de visita y que lo que hacen juntos es un pic nic. La presidenta de Argentina, por su parte, se encuentra en apuros por las acusaciones por enriquecimiento ilícito. Bueno, ¿Qué esperaban después de dañar al pueblo hondureño con su mala influencia en la OEA? ¿O es que creen que las medidas de la comunidad internacional contra Honduras afectarán a la clase política o la elite oligárquica? Pues desde luego que no. Como siempre, las medidas afectarán principalmente a las clases trabajadoras y media. Por haber afectado a un pueblo que hoy en día cuenta con el favor de Dios, pronostico que a estos personajes aún les espera sus peores días. Sobre el presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Miguel D’scoto, no tengo mucho que decir. Cuando todo el mundo lamenta la decisión de Zelaya de llamar a la insurrección, D’scoto la celebra, por lo que pienso que sufre de una severa desorientación espacio-temporal. Es decir, el anciano no sabe ni donde está parado.

Quiero recalcar que en Honduras sí existen problemas graves. La mala distribución de la riqueza es extrema, y la impunidad ha sido la norma. Ejemplos de problemas en Honduras que no deben pasar inadvertidos en estos momentos son: 1) Los monopolios y oligopolios con prebendas que hacen imposible la competencia por parte de otros empresarios nacionales. 2) La millonaria defraudación fiscal por parte de grandes empresas. 3) La impunidad ante los delitos financieros (quiebra de bancos). Y la más importante, 4) la enorme brecha educacional entre los que pueden pagar una educación privada para sus hijos y los que no pueden, lo que le niega a las clases trabajadoras incluso la oportunidad de competir en el futuro en igualdad de condiciones intelectuales. Los grupos de poder hondureños deberán tomar cartas en estos y otros asuntos a la brevedad posible, y de una manera decidida, antes de que los cantos de sirena del socialismo del siglo 21 logren encantar a una proporción creciente de la población hasta alcanzar la masa crítica necesaria para la revolución. Recordemos que la línea que separa la opinión pública es sutil, y la balanza se puede inclinar en el otro sentido si permanecemos sordos a las demandas de un pueblo cuya única manera de prosperar hasta el momento ha sido cruzando el Río Grande, con dirección hacia el Imperio.